martes, 1 de diciembre de 2015

La historia de salvación de la Iglesia y la sociedad, está en la familia.



Lo de HOY

Por: Pascual Ortiz



Cuando la familia se deja conducir por los corazones de Jesús y María, se arriesga a ser feliz,  vive el encuentro del amor más fecundo que une a la pareja y los hijos/as.





El Papa Francisco  continua reflexionando el tema de la familia, ahora nos motiva a vivir  el compartir con alegrías los “bienes de la vida y ser felices de poderlo hacer”.  Celebramos el mes de la familia y la no violencia. Estas reflexiones deben de ayudarnos a mejorar nuestra relación familiar. Todo depende de nuestra actitud y de cómo la familia vive en el hogar cada momento su convivencia.

Creo, que la familia cristiana de hoy ha sabido responder a la relatividad en que la sociedad impone la relación y experiencia. Ha tenido que vencer ataque feroce, despiadado, incomprensible en contra de la institución familiar. Mostrando su fidelidad al matrimonio tradicional. Vocación que se fundamenta en el amor fiel y  fecundo.  Evidente  en  los hijos e hijas,  en el respeto de ambos; hombre - mujer.

Cuando la familia se deja conducir por los corazones de Jesús y María, se arriesga a ser feliz,  vive el encuentro del amor más fecundo que une a la pareja y los hijos/as.

Estamos en un tiempo, donde la familia necesita más que nunca encontrarse con Dios. Para que ese encuentro tenga durabilidad, debe hacerse a través de la intermediación de los corazones de Jesús y María. Que  une toda relación de pareja.  Hace fecundo, fiel, respetuoso;  la familia siente la bendición en su cotidiana lucha.

El amor que los une, se manifiesta de manera sagrada, en cada relación  de la familia. Tanto el corazón de ella, como el de él y el de los hijos/as. Los une la bendición divina, de los corazones sublime de Jesús y María.

Sin embargo, es necesario reconocer, que las garras malignas se han adueñado de la cotidiana vida de muchas familias. Desamor, infidelidades, mentiras, engaños, hipocresía, violencia, compra de placeres, ventas de placeres, mal usos de los recursos económicos y naturales, asesinato, mutilaciones, drogas, huida de Dios, encuentro con el diablo, irrespeto, ruidos, malas palabras,  burlas, corrida maratónica a lo más fácil, tentaciones que se ejecutan, vendedores de maldades y corrupción…

Es tal la degradación, que el desconocer todo lo que es bueno, solidario, lo que une, construye el amor de la familia. Es la oferta cotidiana de quienes controlan sus medios de producción, el mercado, la política y las leyes. Se educa y se hace comunicación en favor de esta locura que desconoce la vida.

La ideología de la muerte es el soporte de muchas convivencias y la relación humana. (Noviazgo, trabajo, estudios, deportes, política, música y familia). Es como si de repente la sociedad quisiera suicidarse.

La tecnología, ha ayudado a la humanidad a ir conociendo la anatomía del ser humano y sus motivaciones psicológica. Los componentes de los elementos que forman los recursos naturales. Pero también, esta ha servido para construir sofisticada herramienta  para destruir a ese ser humano, familia y su entorno natural.

La crisis que vive la familia, es porque se viene desarrollando un pensamiento, inducción filosófica, antropológica  -          (TEOLOGICO)… SOCIAL Que se va realizando de manera concreta – económica - político – cultural  contraria a sus “valores” tradicionales, fundamentales.

El concepto de matrimonio o familia tradicional sufre una profunda ambigüedad, con relación al género, la fe, lo moral, hijos/as.  Lo natural no es lo que decide su sexo, sino el género que ese ser humano (con derecho humano) quiere… Ya no se nace con el sexo… sino lo que quiera (sexo tener) vivir.

(LEGALIDAD-ABIERTA a interpretación de cada juez…)  (DERECHO HUMANO hacer lo que les venga en gana Matrimonio hombre-hombre—hombre animales---mujer animales)…


Para que sucedan las maldades hace falta la participación del ser humano. Eso mismo sucede en la relación de la familia. Para que se manifieste Dios, hace falta la participación de las personas. Para que el amor en pareja se manifieste, hace falta la actitud de la pareja. El diablo no se manifiesta en la nada, es a través del ser humano. Así tampoco Dios se manifiesta en la nada, es a través del ser humano.

Los Sagrados Corazones se  presentan para cambiar la familia. No importa que tan grande sea el problema que se manifiesta en la pareja, en la familia.  La familia es el nido donde se cuece la vida humana y se manifiesta el amor más grande. Que viene de Dios. Pero los valores que se manifieste en la familia, dependerá de la  espiritualidad que sostenga ese hogar.

Como te encuentra como esposo contigo?
Como te encuentra como esposa contigo?
Como se ven ambos en su relación y  los hijos/as?

El encuentro no podrá ser contigo, sin contar con el otro/a. La única forma de encontrarse contigo, es encontrándote en ella, es encontrándote en él. Porque al unirse ya no son dos. El amor ha fundido los sueños, la vida de dos en uno,  se hace visible en los hijos/as, en familia.

En el amor de pareja, no se ve lo que en un momento fue de uno. Ya ese uno individual, es uno de dos. Que lo une el amor. Se engrandece ese amor cuando llegan los hijos/as. Se abre una realidad que evidencia que tan fecundo, fiel y respetuoso es la unión de la pareja.

Es importante dejarse guiar por la espiritualidad del amor, la fe, que se manifiesta en la fuente inagotable de los corazones de Jesús y María. Ir a su encuentro, es arriesgarse a ser feliz, es correr al encuentro del amor que une a la familia.

El amor de los Sagrados Corazones, bendice la relación de la familia. La purifica, la hace humilde fidelidad cotidiana. En cada tentación,  encuentra (ella-el) la salida del retorno, al amor que une su corazón  para siempre y vivir su amor con su pareja en familia, la fidelidad, de la reconciliación eterna en la tierra.  “Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre.” (Mt 19,6).

Lo que por los corazones  se aman, se han unido, no lo podrá separar nadie. No te deje engañar por quienes le corren a la felicidad en familia.

Ser feliz, es la bandera de la pareja. Si ama será feliz. Si ama perdona. Si ama no será infiel. Si ama la bendición de los sagrados corazones, será para siempre…

En todas las culturas la familia es reconocida como el  lugar más pequeño de toda sociedad y espacio de la más profunda intimidad de la Nueva Alianza. Al hablar de la familia que fundamenta su relación desde la fe cristiana, se habla de la familia de Nazaret, del Corazón de Jesús y del Corazón de María.  

La historia de salvación de la Iglesia y la sociedad está en la familia. (Gen 1,26-27). Estamos por ello, llamados a dar los pasos necesario para transformar la cultura del relativismo, la violencia de que son víctimas los niños y las mujeres, consumismo, la explotación sexual, , que afecta el matrimonio y la familia. (Mc10, 1-12).

Pase lo que pase, da un paso hacia el encuentro con tu familia.




No hay comentarios:

Publicar un comentario