¿Cuál es el dios del Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez?

Por: Pascual Ortiz

Parecería contraproducente, el que un simple bautizado, como yo; cuestione la aptitud que históricamente tiene el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, en contra del pueblo haitianos. Pueblo escogido por el Dios de Jesús,  por ser perseguido, maltratado hasta la muerte; injusta y a destiempo. Pero, "si me han perseguido a mi, también les perseguirán a ustedes"(Mc 13, 13; Jn 15, 18).

Jesús nos llama a acoger al hambriento, al abandonado, al necesitado, al despreciado…, a los pobres. Porque en sus realidad hizo su morada para siempre, el Reino de Dios (Lc 17, 21) Es cuestiónante por ello el que, uno que se llame Cristiano, seguidor de Jesús, pueda expresarse de la manera como habla el cardenal, de quienes defienden al pueblo haitiano. Es que vemos más fácil “la paja en el ojo ajeno que la viga en el propio” (Mt 7, 3) No así, se expresa de quienes someten y esclavizan a este pueblo, de hombres y mujeres dignos y merecedores de respeto. “Si oís hoy la voz de Dios, no endurezcáis vuestro corazón” (Sal 94).

Como cristiano creo que debo de ver la realidad y a los seres humano con la mirada de Jesús. Que la enseñanza de Jesús, nos manda a ser hermano y defensor del que sufre, el que llora, del que es maltratado…, no importando el estatus político-social o la nacionalidad que tenga, porque Dios no es racista, ni exclusividad de nadie ( 1 T m 2, 4). Solo por el hecho de ser un ser humano, debo de amarlo/a, respetarlo/a, defenderla/o y demandar que se le deje vivir. Porque todo ser humano es criatura de Dios y porque “ustedes serán mis testigos” (Lc 24,44-49)

¿Cuál es el Dios del Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez?, ¿No creo que sea el Dios que Jesús nos enseño a seguir? “Porque has sido fiel en lo pequeño yo te voy a poner al frente de grandes responsabilidades” (Mt 25, 23) ¿Tras las huellas de quien va el Cardenal, cuando se expresa así, de los haitianos/as y de quienes demandan respeto a su dignidad humana?

Como seguidores de Jesús, más bien tenemos que buscar junto con el pueblo haitiano y dominicano su liberación del pecado, la injusticia y el desconocimiento de sus derechos. Ese es el compromiso del seguidor de Jesús (Mt 7,21). Estar al lado de los oprimidos/as, no al lado de quienes hacen sufrir al pueblo (Lc 2, 50-52). En ese sentido debemos de afirmar, que el cardenal, no está de lado del pueblo de Dios, no está de lado del Dios de Jesús. Está ubicado del lado de los opresores y satisfechos (Lc 15, 11-32; Mt 21, 31-32)

Jesús, como conocedor de la realidad histórica que ha vivido su pueblo, tiene que hablarle de cómo pueden acercarse a Dios, de cómo ese Dios lo deben encontrar en el hermano/a, que está ahí tirado en el camino. De ese que tiene otra historia, otra bandera, otra nacionalidad (Lc 10, 25ss)

En la medida que transformamos este mundo de pecado, se hace visible el Reino de Dios. Y solo es posible ver esa realidad, si nos dejamos llevar por el Dios de Jesucristo. En este seguimiento vivimos un proceso de conversión, de cambio, de tentación permanente, pero sabemos que es posible desde la fe, proclamar y vivir el Reino de Dios. El testimonio de los apóstoles, nos muestra que el desafío de hacer evidente el Reino, es posible “Lc 24, 47; Hech 2, 38; 5, 31; 13, 38)”.

Entonces, debemos de orar por todo ser humano que desconozca la dignidad de otro ser humano. Debemos de reconocer nuestras debilidades, nuestras tentaciones y acciones que nos alejan de Dios. (Mt 4, 1-11; Lc 22,28).

SOLIDARIDAD CON HAITI... Ellos/as, son nuestros hermanos/as mas necesitados/as. No les abandonemos, no lo usemos como carnaza para beneficio particulares. Haiti nos necesita, tendamos le las manos, de manera desinteresada y  respetando su dignidad...