viernes, 17 de diciembre de 2010

¡Si al 4 % para Educación! Quién LES PONE EL CASCABEL, AL GATO…?

Lo de HOY

Escrito por: Pascual Ortiz (komera@hotmail.com)

San Ignacio de Sabaneta. En la República Dominicana, hemos venidos observando con asombro, como el presidente Leonel Fernández, se ha venido convirtiendo en el primer violador e incentivador para que los funcionarios de su gobierno, sin miramiento y sin respeto a la sociedad dominicana, violen las leyes que rige el país.


Es sorprendente, pero la constitución de la republica (su constitución-burguesa y neoliberal) no tiene ni un año de promulgada. La que se hicieron a las medidas, reformistas, peledeistas y perredeistas. Queriendo con ello darle un carácter institucional. A sus injustificadas acciones pero, ya no le sirve. Muy pronto veremos que plantearan y harán una nueva reforma, al malogrado e insignificante documento constitucional.

Sin embargo, ¿para qué reformarla, si no la cumplen? ¿Para qué dialogar con un gobierno que no cumple, ni respeta las normas que debe de hacer respetar? ¿Qué podemos esperar de una clase política que se cubren unos a otros?

Vengo expresando desde que es asumido hacer opinión pública, ya sea por escrito, radial, televisiva o en la Web. Que no hay manera de cambiar la situación que vive el país, si no se hacen las reformas estructurales que necesitamos. Esas reformas, esos cambios; no lo harán una clase política amañada y cómplice una de otra. Entiéndase, el PRD, PLD y PRSC. Tienen unas estructuras políticas, corruptas y corruptoras. Es como querer echar vino nuevo en un odre viejo.

No podemos seguir probando lo que ya conocemos. Hemos sido dirigidos por los tres partidos tradicionales y… ¿Cuál ha sido la experiencia? ¿Cuál problema podemos reseñar que ha sido solucionado, por uno de esos gobiernos que hemos experimentado? Si observamos en nuestra provincia de Santiago Rodríguez, ¿Quiénes se han beneficiados? ¿Quiénes han mejorado sus niveles de vida? Tanto los reformistas, perredeista y peledeista han cambiado y aumentado sus riquezas.

Los proyectos de desarrollo que pudieron haber mejorados la producción agrícola, lechera, arreglo de calles, construcción de carreteras y caminos vecinales de la provincia. Esos recursos, ¿dónde están? Lo han cogido ellos, los políticos y dirigentes locales.

Hoy vivimos con las mismas precariedades de hace 20 años. Seguimos padeciendo la falta de aguas potables. A los campesinos/as no les llegan los recursos, que vienen destinados para préstamos. Esos recurso se le prestan a los miembros del partido de gobiernos y ha allegados. Pero, esos recursos se supone que deben ser para préstamos para pequeños/as productores/as, del campo.

Vivimos atrapados en una especie de pesadilla. Sin embargo, no podemos seguir echándole las culpas a los chupa sangre de los partidos políticos y sus inversionista. Ya sabemos a quienes responden, ya los conocemos y estos no pueden ya seguir escondiendo lo robado y malversado.

Y lo que sucede hoy con el 4% del Producto Interno Bruto (PBI), que por ley se debe de invertir en la educación del país. Al negarlo están con ello violando las leyes. Si estuvieran los perredeista haría lo mismo. ¿Acaso no fue lo que hicieron en los gobiernos de Jorge Blanco e Hipólito Mejía? Como también lo hicieron los Reformistas en su momento.

Las consecuencias de todo ello es; la perdidas de los valores que sustentaban las costumbres del pueblo, un gobierno atrapado por la corrupción y con ellos por los carteles de la drogas. Desintegración familiar. Irrespeto a nuestros mayores. Desvalorización de los símbolo patrio. Todo se vale, meno hacer el bien.

Es doloroso expresarlo, pero es la realidad que estamos viviendo hoy. Todos los hombres y mujeres de buena voluntad y amante de la patria dominicana, debemos unir nuestras luchas, debemos enfrentar con franqueza los destructores de la patria.

“TODA AUTORIDAD NO CONSTITUIDA CON ARREGLO A LA LEY ES ILEGITIMA, Y POR TANTO, NO TIENE DERECHO ALGUNO A GOBERNAR NI SE ESTA EN LA OBLIGACION DE OBEDECERLA.” Juan Pablo Duarte.

Estamos cansados ya de buenas intensiones…

Si al 4% para la educación.

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