miércoles, 4 de agosto de 2010

VIVENCIAS QUE DEJAN MORALEJAS

Por: Dilmarys Cuello
EXISTEN PERO NO VIVEN
Creo que fue un privilegio, el poder participar de una protesta justa. La última huelga encabezada por el sindicato de chóferes Santiago Rodríguez—Santiago, me permitió darme cuenta de una gran realidad que desde siempre ha estado ante nuestro ojos, me di cuenta que las personas de las Caobas, Los Tabaco y la entrada de Caimoníes, Existe pero no viven.



Tuve el privilegio de estar ahí, frente a sus casas polvorientas y no solo me contuve con pasar todos los fines de semana, estuve ahí. Estar hablando con las personas que le ha cambiando el color de pelo, no por gusto sino por el polvo. Estar ahí, para escuchar a un efectivo de la policía decirle a un reportero de Mao, “Vete, tu sabes que ya nosotros hubiésemos terminado esto”. Estar ahí para ver y oír a un ciudadano, que le afecta el polvo, que su camioneta se está dañando igual que los demás vehículos, que tienen que transitar por esa vía, tirar tiros a sus compueblanos para intimidarlos, solo porque esto afectaba a su partido, yo estuve ahí.

Me parece que Existir y vivir no es lo mismo. ¿Quiénes viven? ¿Quiénes existen? Es discutible el punto en nuestro país, se nos permite existir, pero parece que para vivir, hay que hacer múltiples esfuerzos. Como siempre me permito, traer a usted algunas definiciones de ambos conceptos, que juntos hacen un retrato contrastado de nuestra cruda realidad. Existir: Dicho de una cosa: Ser real y verdadera. También es aunque parezca contradictorio: Tener vida. Y esta es una muy buena: Haber, estar, hallarse. Y aquí viene el otro. Unas cuantas definiciones de lo que es vivir; no es menos cierto que usted puede tener la suya propia y que no necesariamente usted tenga que estar de acuerdo con esta pero de todas formas y como ya se está haciendo un hábito en nosotros se las muestro. Vivir: Tener vida. Puede Ser también: Durar con vida. De otra forma se puede referir al término como: Duración de alguna cosa. Pasar y mantener la vida. Habitar o morar en un lugar o país. Obrar siguiendo algún tenor o modo en las acciones, en cuanto miran a la razón o a la ley. Esta da al traste a lo que trato de explicarles, léala detenidamente por favor: Acomodarse a las circunstancias o aprovecharlas para lograr sus propias conveniencias. Pero vivir puede muy bien también encasillarse en esta definición: Conjunto de los recursos o medios de vida y sustancia. Microsoft® Encarta® 2008.

Si solo les presento estas definiciones no es porque no existan más, las hay, pero se encontraran ustedes que nos llevan al mismo razonamiento. Si en verdad lo que nosotros tenemos es vida, que mala vida llevamos. ¿Es que vivir depende solamente del tipo de carro? O no mejor aún es ¿que para vivir, se tiene que inscribir en un partido? Muchas preguntas pocas respuestas o tal vez más preguntas que respuestas.

Me da mucha vergüenza ver como muchos viven de las miserias y carencia extrema de otros. Me duele mucho el ver a alguien viajar con el dinero del que solo ha visto un avión por televisión y eso, la televisión de un vecino, pues aún es este siglo hay personas que no tienen tal medio de comunicación. Más aún me molesta, el que se nos quiera allantar de tantas formas y por tantos medios de que aquí, en este país, en esta provincia, en nuestro municipio todos viven, cuando sabemos que lo único que conviene es que sencillamente sigan existiendo. Yo creo que estoy haciendo mi parte y me falta, ¿le puedo preguntar algo? ¿Y usted que está haciendo para que esta realidad cambie?

Como dice una joven hermana en la congregación, “Dejemos que hable la palabra” En mi Biblia dice- espero que en la suya también- : “Porque Dios no es injusto para olvidar vuestras obras………” Hebreos 6: 10 (Reina Valera 1960)

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