miércoles, 2 de junio de 2010

Y agreguen palestinos.-


POR ALVARO ARVELO HIJO*



Varias personalidades de diferentes expresiones de la cultura mundial piden la “democratización” de la hermana, vecina y “fascinante” isla cubana.



Entre los firmantes del documento que exige que Cuba caiga dentro de la democracia (que obviamente no se refiere a la “democracia” de los generales Gerardo Machado y Fulgencio Batista) se encuentran escritores de la categoría (no podía faltar) del novelista peruano Mario Vargas Llosa, e1 escritor chileno Jorge Edwards, el cineasta español Pedro Almodóvar y otras figuras del mismo calibre.

Aunque yo no tengo espíritu gregario (en esa línea me enmarco en las ideas del filósofo español José Ortega y Gassett) sino que soy un pequeño “Lonsome Ranger”, me atrevería a firmar la carta que pide que Cuba retorne al "concierto" (sin los 3 tenores) de las naciones democráticas.

Supongo que los firmantes de tan valiente y democrático pedido en favor de Cuba y del sistema se refieren a la democracia que hay en Suiza, Noruega, Finlandia, Islandia, Suecia, Dinamarca, Estados Unidos, Italia, Inglaterra, Francia, España, Alemania, Portugal, Argentina, Chile, Brasil, Venezuela, Colombia, Holanda, la República Checa, Eslovaquia, Israel, República Dominicana, Austria, Canadá, etcétera.

No creo que se refieran a la democracia (?) de Arabia Saudita, Egipto, Jordania, Bahrein, Emiratos Árabes, Somalia, República Democrática del Congo, Tailandia, Etiopía, Libia, Sirria, Kuwait, Rusia, Pakistán, Irak, Ruanda, etcétera.

Tampoco creo que están pidiendo que Cuba vuelva a una “democracia” como la de Haití, el país más pobre del hemisferio occidental y uno de los 5 más pobres del mundo. Ni a las democracias de las hermanas y sufridas naciones centroamericanas, en las cuales democracia es apenas una pobre palabreja en el diccionario de la trampa.

Bueno, yo insisto en que Cuba debe democratizarse porque ya pasó la regla normal de la “dialéctica” de la historia y entró en la decadencia biológica e histórica un régimen de medio siglo.

Lo único que yo me permitiría pedir a los autores del documento es que antes de colocar en el mismo mi humilde firma, ellos, las personalidades que lo firman, exijan también que se cumpla la resolución de la ONU de 1947 que exige la creación del estado palestino, para que conviva con el formidable estado israelí.

¿Qué les parece, caballeros de la democracia?

¡Anímense!


*EL AUTOR es periodista. Reside en Santo Domingo.

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