El nuevo mandatario de Colombia insistió, durante su primera rueda de prensa, en su interés por restablecer las relaciones con la nación ecuatoriana y con la venezolana luego de que se experimentara problemas diplomáticos con ambas naciones durante la administración de Álvaro Uribe.
Las relaciones entre Bogotá y Quito sufrieron un gran altibajo a raíz de que el Ejército colombiano llevara a cabo un bombardeo en la localidad ecuatoriana de San Martín, en Barranca Bermeja, provincia de Sucumbíos (norte) para atacar un campamento provisional que tenía las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en ese lugar.
En el hecho sucumbieron 20 personas entre las cuales se encontraba el ex número dos de las FARC, Raúl Reyes.
Con respecto a los vínculos con Venezuela, estos alcanzaron su punto más álgido cuando Colombia firmó con el Gobierno de EE.UU un acuerdo en el cual la nación del norte instalaría siete bases militares en el país colombiano.
El pacto también incluía la presencia de por los menos 800 efectivos del Ejército estadounidense y 600 civiles contratistas del país del norte.
Ante esta situación, el Ejecutivo venezolano tomó la determinación de congelar las relaciones con Colombia en Julio de 2009.
Durante el encuentro con los periodistas, Santos manifestó sentirse muy satisfecho con la llamada de Correa, la cual consideró que se realizó en un tono muy cordial y con disposición a limar asperezas con la nación vecina.
"Hablé con el presidente Correa esta mañana, él me llamo, de forma muy amable dialogamos sobre la forma de buscar una ruta para mejorar aún más las relaciones y acelerar ese proceso" de normalización de relaciones, indicó.
En cuanto al comunicado publicado por el Gobierno venezolano, el nuevo líder colombiano apreció el gesto como algo positivo para los dos Estados.
"No quiero precipitarme en decir cómo vamos a actuar, pero valoro muy positivamente ese comunicado y ese gesto de Venezuela, felicitando al pueblo colombiano y a mí como presidente electo, es un muy buen primer paso y buen comienzo para el restablecimiento de las relaciones", afirmó.
También expresó sus mejores intenciones y voluntad de darle tranquilidad y confianza a los venezolanos con esta nueva administración colombiana.
Santos comentó que se sintió complacido con el silencio que guardó el mandatario venezolano, Hugo Chávez durante la segunda vuelta electoral de las presidenciales colombianas.
En lo concerniente a las relaciones con Estados Unidos, el nievo mandatario indicó que la colaboración entre ambas naciones para combatir el narcotráfico proseguiría debido a que este conflicto representaba para el pueblo colombiano un problema de seguridad de Estado.
"Nosotros tenemos que seguir combatiendo al narcotráfico que es y ha sido por muchos años la fuente de todas las manifestaciones de violencia que tanto daño le han hecho a nuestro país", reiteró.
Acotó que la lucha en contra el tráfico de drogas era un problema que Colombia no podía manejar sola y necesitaba la colaboración de otros países para enfrentar este flagelo.
Por último, Santos aprovechó la ocasión para comentar que, antes de la toma de posesión de la silla presidencial, que se llevará a cabo el próximo 7 de agosto, planeaba descansar unos días y realizar una gira por el exterior.
teleSUR - Efe - Afp - Qué es/jl/IM
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